¿Debería obligar a mi hijo a socializar más?
Mi hija es solitaria pero no hace nada para cambiarlo. ¿Debería forzarla a hacer planes y participar en actividades grupales?
Pocas cosas perturban más que ver a su hijo quedarse solo después de clases mientras que los demás se han ido a jugar con sus amigos. O descubrir que su hijo almuerza solo en la escuela. O ver a su adolescente malhumorado en la casa durante los fines de semana porque no tiene nadie con quien salir.
La mayoría de los chicos no necesitan tener muchos amigos. Pero las amistades, tanto en los primeros años de escuela, y luego cuando son adolescentes, son fundamentales para el desarrollo social y emocional del niño.
Aprender cómo establecer buenas relaciones con los compañeros es una habilidad esencial que los niños usarán y mejorarán a lo largo de la vida. Por ello, forzarlos a participar en situaciones sociales no los ayudará. En lugar de eso, ayúdelos a desarrollar habilidades y la confianza que necesitan para disfrutarlas.
Entonces, ¿qué puede hacer para ayudar a un niño que no tiene amigos?
Averigüe lo que está ocurriendo. Antes de hacer que participe en actividades con otros niños, es importante averiguar cuál es el obstáculo para que haga amigos. Vea qué puede aprender al hablar directamente con ella. Por ejemplo, podría preguntarle si prefiere estar a solas en su habitación leyendo y dibujando. (Lea sobre cómo hablar con su hija acerca de asuntos sociales y emocionales).
Lea la historia de una mamá que descubrió que para su hijo ser solitario no es lo mismo que sentirse solo.
Si eso no funciona, trate de hablar con su maestro o con el consejero escolar. Para saber cómo ayudar, necesitará saber por qué está pasando tanto tiempo sola. Estas son algunas preguntas que puede plantearles al maestro o consejero:
¿Mi hija parece tímida o ansiosa cuando está con otros chicos?
¿Está siendo acosada en la escuela?
¿Evidencia cualquier otra señal de malestar emocional?
¿Está teniendo problemas para “adaptarse”?
¿Este comportamiento es nuevo? Si el aislamiento de su hija es un cambio repentino de comportamiento, puede que se trate de algo más que un caso de timidez.
Trate de averiguar qué está pasando en su vida, incluida la escuela. Muchos chicos que están siendo acosados se sienten demasiado avergonzados como para reportarlo a sus padres o incluso a sus maestros. Reafirme a su hija que usted la ama y que no tiene nada de qué avergonzarse.
Ganar su confianza con gentileza es la mejor manera de iniciar una conversación acerca de un tema doloroso. Si la conducta evasiva de su hija es algo nuevo, podría indicar depresión, la cual a menudo causa que los chicos eviten a los amigos y las actividades sociales. Revise una lista de cambios de comportamiento que pudieran ser una señal de depresión.
Si su hija presenta varios de estos síntomas, contacte a su médico y pida que sea evaluada por un profesional de la salud mental. Tratar la depresión es esencial para tener una vida social más activa.
¿Está inusualmente ansiosa en presencia de chicos de su edad? La ansiedad severa también es algo que puede causar que hasta los niños pequeños se aíslen o eviten a otros niños. Conozca las señales de ansiedad en niños pequeños.
Cerca de la pubertad, algunos chicos desarrollan el trastorno de ansiedad social, lo cual significa que les preocupa excesivamente lo que otras personas piensan de ellos. Con frecuencia evitan situaciones sociales en las que temen que podrían avergonzarse de ellos mismos. Conozca las señales de ansiedad en adolescentes y preadolescentes.
Si su hija parece tener problemas de ansiedad, este es otra razón para contactar al médico y solicitar una evaluación de su estado mental.
Si no existe evidencia de acoso o de un trastorno emocional que podría estar causando el problema, estas son algunas otras cosas que puede hacer para ayudar.
Cómo ayudar a los niños pequeños a socializar
Primero que nada, no se preocupe si su hija es un poco más indecisa en situaciones sociales. Esperar que todos los niños participen y sean los líderes del grupo no es realista. Pero hay cosas que ayudarán a su hija a sentirse más cómoda en una situación social:
No presione demasiado. Cuando los chicos tienen dificultades, forzarlos a hacer algo en contra de su voluntad rara vez mejorará la situación. En su lugar, intente escoger tres actividades diferentes que su hija puede hacer y dígale que escoja la que más le guste.
No sienta que debe invitar a más niños que podrían convertirse en amigos. Usted quiere facilitar oportunidades para que los chicos tímidos conozcan a posibles amigos. Pero quiere ayudarlos a que no se sientan demasiado incómodos.
Al principio planee reuniones de juego en su casa. Si su hija puede ser la anfitriona de una reunión para jugar, probablemente se sienta más a gusto en su propia casa.
Anime a su hija a participar en clubes u otras actividades que le interesen. Estas son buenas maneras de hacer amigos porque proporcionan una estructura que ayuda a minimizar la ansiedad.
Planee actividades familiares. Esto puede poner en contacto a su hija con otros niños de su edad.
Ayúdela a ensayar situaciones que la ponen nerviosa. Esto podría ser asistir a una fiesta de cumpleaños o conocer un nuevo grupo de personas.
Algunos niños tienen dificultad para congeniar con sus compañeros. Ciertas dificultades de aprendizaje y de atención pueden dificultarlo aún más. Por ejemplo, los niños con dificultades de atención pueden distraerse con facilidad y ser lentos para captar las pautas sociales.
Conozca cómo la dificultad para captar las pautas sociales se evidencia en los diferentes grados escolares.
Intente entrenarla en la casa. Enfatice el acto de esperar su turno y compartir cuando juega con la familia y explíquele que los amigos esperan el mismo comportamiento.
Practique diferentes estrategias para mantener la paz. El juego de roles puede ser muy útil para esto. Juegue con su hija a ser al anfitrión y el invitado. Intente anticipar qué tipo de peleas podrían surgir y represéntelas con su hija.
Dé el ejemplo con su comportamiento. Demuestre cómo le gustaría verla actuar cuando hable con los miembros de la familia y sus amigos. Poner atención a los demás, ser generosa e intentar resolver los conflictos con tranquilidad.
Revise con su hija las pautas sociales antes de las reuniones para jugar. Pregunte a su hija cómo sabrá si sus invitados la están pasando bien. ¿Están sonriendo? ¿Riendo?
Explique qué es ser un buen anfitrión. ¿Qué hará ella para hacer que sus invitados se sientan a gusto?
Pídale que con anticipación seleccione algunos juegos. ¿Cómo sabrá su hija cuándo es el momento de pasar al siguiente juego?
Lea otras ideas para ayudar a los preescolares y a los estudiantes de primaria a que sus reuniones de juegos sean divertidas.
Cómo ayudar a los adolescentes a socializar
Las amistades ofrecen más que compañía y entretenimiento a su adolescente. Tener buenas amistades le permite empezar a ser más independiente gracias al desarrollo de relaciones solidarias y confiables fuera del círculo familiar.
Háblelo. Intente averiguar cuál es el problema según ella. Anímela a hablar acerca de lo que podría hacer para mejorar la situación.
Haga preguntas. Ayúdela a proponer ideas para hacer amigos que se sienta segura de probar.
Ayúdela a practicar las habilidades necesarias para conocer personas y desarrollar amistades. Jueguen a los roles hasta que ella se sienta cómoda para aproximarse a otros adolescentes, presentarse y mantener una conversación.
Considere inscribirla en nuevas actividades. Esto puede ayudarla a conocer a otros adolescentes fuera de la escuela o del vecindario (si no está segura de qué podría gustarle, pruebe estas ideas).
Trate de hacerse amiga de los padres de sus compañeros de clase. Invitar a los padres y a los adolescentes a eventos sociales puede ayudar a los adolescentes tímidos a interactuar con otros chicos, incluso con los que su hija cree que no le gustarán.
Facilite que las cosas ocurran. Si usted tiene un auto, ofrézcase a llevar a su hija y a sus amigos a eventos sociales y a actividades extracurriculares, o permita que su hija invite a un amigo a las salidas familiares.
No la obligue a hacer algo. Forzarla no es una buena manera de lograr que coopere, particularmente en los adolescentes que están intentando ser más independientes. Para muchos chicos es suficiente encontrar una sola cosa que les gustaría hacer una vez por semana. Intente ayudarla a encontrar esa cosa.
Sin importar la edad de su hija, usted no puede hacer amigos por ella. En definitiva, ella tiene que hacer el (en ocasiones difícil) trabajo de desarrollar lazos sociales.
Pero si observa que su hija tiene problemas para hacer amigos o los otros chicos la rechazan, no sea pasiva ni se sienta miserable. Hay mucho que usted puede hacer para ayudarla a desarrollar y practicar las habilidades sociales importantes necesarias para hacer uno o dos buenos amigos. Eso es todo lo que cualquiera realmente necesita.
¿Está buscando más ideas? Explore maneras de ayudar a los preescolares, estudiantes de primaria y de escuela media a relacionarse con otros chicos.