TDAH y sobrecarga sensorial
Consejos prácticos para manejar la sobrecarga sensorial
- Consejo práctico 1Busque los desencadenantes a su alrededor.Busque los desencadenantes a su alrededor.
Ponga atención a su entorno. Enfocarse de manera intencional en lo que sucede a su alrededor puede ayudarlo a descubrir si hay demasiada información sensorial que proviene de un sonido, un elemento visual, un olor u otra cosa que no notó inicialmente.
Las texturas de los alimentos. La sensación que producen ciertos tipos de ropa. Los cambios en la rutina. Una sobrecarga sensorial ocurre cuando algo sobreestimula uno o más de los sentidos. Al cerebro le llega repentinamente demasiada información para procesar. Esto es común en personas con dificultades del procesamiento sensorial.
Muchas personas asocian la sobrecarga sensorial con los niños que tienen el trastorno del espectro autista (TEA). Pero también puede ocurrir con otros diagnósticos como el TDAH. Los investigadores siguen buscando las razones exactas por las que suceden las sobrecargas sensoriales. Pero descubrieron que hay determinados tipos de información sensorial, como la textura de la ropa y los alimentos, que tienen más probabilidades de causarlas.
Algunos síntomas del TDAH, como la dificultad para prestar atención a lo que sucede alrededor, pueden conducir a una sobrecarga sensorial. Cuando usted no está atento, la información sensorial puede tomarlo por sorpresa.
Imagine que tiene prisa por salir en la mañana y de pronto se da cuenta de lo tarde que es. En los dos minutos que tiene, agarra la primera camisa y par de zapatos que encuentra y se los pone. Pero la camisa que agarró tiene una etiqueta que le molesta y los zapatos le aprietan. Una vez que ha salido ya es demasiado tarde. Su ropa incómoda ya ha creado una situación de sobrecarga sensorial.
Existen también otras razones por las que las personas con TDAH pueden experimentar una sobrecarga sensorial. Los problemas con la autorregulación pueden ser un factor. También la dificultad para cambiar de enfoque, es decir no tener pensamiento flexible.