Pasos a seguir para no perder la calma
Es normal que los padres pierdan la calma algunas veces. Y ser padres de niños que piensan y aprenden de manera diferente puede ser particularmente complicado. Cuando sienta que se está enojando con su hijo es de gran ayuda tener un plan para calmarse.
Revise los siguientes pasos y personalice su plan cuando se sienta tranquilo. Puede ayudarlo a permanecer calmado en momentos de enojo.
Dése cuenta de que se está enojando
Esto podría ayudarlo a evitar que le diga algo a su hijo de lo que podría arrepentirse. Aprenda a reconocer cuándo está alcanzando ese nivel de enojo. Luego, dígale a su hijo que necesita hacer una pausa.
Si es posible túrnese con su pareja
Si tiene pareja, establezcan un acuerdo: Cuando uno de ustedes se enoje, el otro se hará cargo y hablará con su hijo.
Cumpla las reglas
Sea claro con respecto a las expectativas y reglas. También sea claro en cuanto a las consecuencias. De esa manera, si su hijo no cumple una regla, usted podrá decírselo con tranquilidad y evitar enfadarse.
Tómese el tiempo necesario para calmarse
Después de explicar a su hijo lo que está pasando, diríjase a otra habitación o salga a caminar. Despeje su cabeza para que pueda mirar la situación con calma y más objetividad.
Busque patrones
Ciertos momentos del día puede que sean especialmente irritantes. Quizás cuando su hijo tiene hambre. Tal vez el momento de hacer la tarea es estresante para todos. Reconocer el patrón puede ayudar a encontrar maneras de prevenirlo.
Dé el ejemplo
Si quiere que su hijo sea tranquilo y respetuoso con usted y con los demás, es importante que usted dé el ejemplo. Tome en consideración y respete sus sentimientos. Decir cosas como: “Ahora estoy enojado, así que me voy a calmar” ayudará a su hijo a aprender a hacer eso también.