¿Por qué mi estudiante de tercer grado de repente está teniendo problemas para leer?
Mi hija está en tercer grado y le estaba yendo bien en lectura. ¿Por qué de repente está teniendo problemas para leer?
Su hija no es la única. A menudo veo niños que comienzan muy bien en lectura, pero en tercer grado encuentran obstáculos. Esto es lo que habitualmente está sucediendo.
Desde el kínder hasta el segundo grado, la enseñanza se enfoca en entender los sonidos de las letras y combinarlos para leer palabras y frases. Esto se conoce como decodificación. Usualmente es con lo que los niños comúnmente tienen dificultades cuando están aprendiendo a leer.
Pero las exigencias aumentan en tercer grado. Algunos niños que adquirieron las habilidades iniciales de lectura se enfrentan al desafío de lecturas más largas y complicadas. Su tarea en este punto es entender y analizar lo que están leyendo. Esto requiere algunas habilidades importantes, incluyendo:
Poder aplicar sus habilidades de decodificación a textos más difíciles
Tener un buen vocabulario
Ser capaces de mantenerse enfocados al leer historias más largas
Poder hacer conexiones con la historia y retener las ideas mientras leen
Ser capaces de formarse opiniones a partir de lo que leen
Cuando trabajo con un niño que en tercer grado repentinamente empieza a tener dificultades, siempre reviso la fluidez lectora para descartar cualquier problema allí. (Esta es la capacidad de leer rápidamente y con pocos errores). Generalmente, no hay problemas con la fluidez.
También me gusta revisar su vocabulario y la comprensión lectora (Esta es la habilidad de entender lo que se lee e incluye una serie de habilidades específicas). La comprensión lectora es un área donde los niños suelen tener dificultades.
Existen estrategias para desarrollar las habilidades de lectura que son necesarias para leer textos más largos, así como herramientas para la comprensión lectora. Pero hay otra manera en la que usted puede ayudar en la casa.
Si a su hija le gusta leer por su cuenta, es posible que usted haya perdido el hábito de leer juntas. Si ese es el caso, le sugiero que lo retome y que con frecuencia le lea a su hija y también lea con ella. Esto ayudará a fortalecer las habilidades que ella necesita para seguir mejorando en este nivel y más allá.
Usted puede leerle en voz alta libros que tengan un nivel de lectura superior al que ella posee y detenerse de vez en cuando para que puedan compartir sus ideas. Esto es muy bueno porque al escuchar textos más complicados que los que ella puede leer, estará expuesta a habilidades de comprensión de un nivel superior que podrá usar cuando lea por su cuenta.
Cuando su hija lea libros a su nivel, usted puede pedirle que le lea en voz alta o pueden tomar turnos para leer. De igual manera, hagan una pausa de vez en cuando para hablar de lo que está ocurriendo.
Sin embargo, incluso con esta práctica adicional los niños pueden seguir teniendo dificultades con la lectura. Tener problemas para leer puede ser una señal de dislexia. No es inusual que los signos de la dislexia se hagan más evidentes alrededor de esta edad. Tener dislexia no significa que los niños no sean inteligentes, pero necesitan ayuda adicional para mejorar en lectura.
Si la lectura de su hija no parece mejorar, tome notas de lo que está viendo. Por ejemplo, si su hija evita leer o se frustra fácilmente, apúntelo.
Usted puede hablar también de sus preocupaciones con el maestro de su hija, y preguntarle qué es lo que está observando en el aula. El maestro podría recomendarle estrategias o sugerir otros pasos para ayudar a su hija con la lectura. Usted también puede hablar de los siguientes pasos si le preocupa que su hija pudiera tener dislexia.