Mi hija no tiene pareja de baile para la fiesta de graduación. ¿Qué hago?
¡Ayuda! Ningún chico invitó a mi hija para que fuera su pareja de baile en la fiesta de graduación de la escuela. ¿Debería animarla a que vaya?
¿Su hija se ha hecho esta pregunta?: Si no va a la fiesta de graduación, ¿cree que con el tiempo se arrepentirá de no haber ido? Si su hija duda, aunque sea un poco, entonces anímela a que vaya.
Tenga en cuenta que la sola idea de asistir a un baile de la escuela podría ser particularmente sobrecogedor para los chicos que tienen dificultades de aprendizaje y de atención. Puede que hayan tenido tenido dificultades interactuando con sus compañeros en situaciones cotidianas. Puede que les preocupe no saber qué decir o cómo actuar en la fiesta de graduación. Usted puede sugerirle que practiquen al juego de roles para ayudarla a prepararse para esa noche tan importante.
Ayúdela a ver la fiesta como una oportunidad para ponerse un vestido elegante, hacerse un peinado y la manicura y lucir diferente. El baile de graduación es básicamente un grupo de adolescentes vestidos especialmente para esa noche y tal vez un poco de baile.
Asegúrese que su hija entienda que hoy en día es muy común ir a las fiestas con un grupo de amigos. Ya no es necesario asistir en pareja, inclusive en ocasiones formales como la fiesta de graduación.
Para los jóvenes que sí van en pareja, ya no es norma que las chicas tengan que esperar a que las inviten. Ellas también pueden invitar a los chicos. Puede que descubran que el chico que esperaban las invitara era muy tímido para hacerlo.
Tampoco las invitaciones para ir a la fiesta de graduación tienen que tener una connotación romántica. Algunos estudiantes llevan a un amigo o una amiga, otros un primo o una hermana. En las ciudades es común que los estudiantes de bachillerato asistan a varias fiestas de graduación con varios amigos.
Muchas escuelas de bachillerato también organizan un evento después de la graduación para que continúe la diversión hasta la madrugada en un lugar seguro. Si a su hija no le interesa vestirse elegante y exhibirse en la fiesta de graduación, quizás esté interesada en ir con sus amigos al evento programado por la escuela después de la fiesta de graduación. Esta es también una oportunidad para que usted converse acerca de la importancia de tomar ciertos riesgos que son beneficiosos y practicar cómo resistir la presión de los grupos.
Su hija tendrá que decidir si quiere ir al baile de graduación, a la fiesta después de la graduación, o a ambas. ¿Quiere llevar a una amiga o a un hermano, ir con un grupo grande, o no ir? Usted puede ayudarla a analizar todas las opciones y entusiasmarla a que tome la decisión que la haga sentir mejor.
Si decide ir, entonces puede comenzar a prepararla para la fiesta de la escuela.