Cómo elogiar a su hijo
De un vistazo
Sea específico cuando elogie a su hijo.
Los elogios ambiguos como “¡bien hecho!” pueden hacer que los niños se pregunten qué fue lo que hicieron bien.
El elogio ayuda a su hijo a saber qué es lo que usted quiere que vuelva a hacer en el futuro.
Tal vez le sorprenda, pero los elogios pueden ser una herramienta excelente para ayudarlo a manejar los berrinches y las rabietas. Ser muy específico acerca de lo que usted está elogiando puede ayudar a su hijo a reemplazar conductas problemáticas.
Este tipo de elogio específico ayuda a su hijo a saber qué es lo que usted quiere que vuelva a hacer en el futuro.
Por qué el elogio debe ser específico
Cuando los niños saben qué es lo que usted espera que hagan, y se sienten recompensados por eso, es más probable que cumplan sus expectativas.
Si los elogios son generales, como “¡bien hecho!”, los niños podrían preguntarse qué fue lo que hicieron bien. En cambio, los elogios que son específicos los ayudan a saber qué es exactamente lo que usted quiere que hagan la próxima vez.
Los psicólogos llaman a este tipo de elogio específico “elogio etiquetado” porque usted le está colocando una etiqueta. Este es un ejemplo: “Me gustó mucho que hicieras tres respiraciones profundas cuando notaste que te estabas enojando”.
El elogio etiquetado describe claramente cuál es la conducta que usted quiere que se repita. Este tipo de elogios pueden ser útiles para todos los comportamientos, no solamente para las pataletas.
Cómo elogiar de forma específica
Elogiar de forma específica a su hijo incluye tres partes esenciales:
Observar cuando su hijo hace algo bien, incluso las cosas más pequeñas.
Elogiarlo por lo que acaba de hacer.
Ser específico para que sepa qué es lo que usted quiere que vuelva a hacer.
Usted puede practicar elogios específicos durante la realización de tareas cotidianas. Por ejemplo, si su hijo acaba de terminar de lavar los platos, usted le podría decir: “Me gustó mucho que secaste la barra de la cocina después de lavar los platos”.
Este es un ejemplo después de un berrinche o rabieta: “Me gustó mucho la forma en que te fuiste a tu cuarto para calmarte cuando te lo pedí y que me dijeras que necesitabas más tiempo cuando te pregunté si ya te habías calmado”.
Practicar elogiar a su hijo
Practique elogiar a su hijo todos los días por cosas pequeñas, como preparar su ropa la noche antes de ir a la escuela o llevar los platos al fregadero después de cenar.
Cuanto más practique, mejor preparado estará para utilizar elogios específicos en situaciones difíciles.
Puntos clave
Utilizar el tipo de elogio adecuado puede prevenir berrinches y rabietas.
Cuando los niños saben qué es lo que usted quiere que hagan, es más probable que cumplan esas expectativas.
Elogie a su hijo por dar incluso los pasos más pequeños para controlar su comportamiento.