TDAH y aburrimiento
De un vistazo
Es común que los niños con TDAH se aburran a menudo.
Estar aburrido no significa ser perezoso o querer portarse mal.
Diferencias en el cerebro pueden causar que los niños con TDAH se aburran con facilidad.
Quejarse de estar aburrido de vez en cuando es parte de ser un niño. Sin embargo, el aburrimiento puede ser un problema persistente en los niños que tienen TDAH (también conocido como TDA).
Esto es lo que usted necesita saber de por qué los niños con TDAH se aburren a menudo, y cómo puede ayudar a su hijo.
Cómo luce el aburrimiento en los niños con TDAH
El aburrimiento no es un síntoma del TDAH. Sin embargo, es un resultado común de tener TDAH y puede llevar a actuar de manera confusa.
Este es un ejemplo. Un niño de primaria con TDAH interrumpe la clase continuamente. El maestro cree que lo hace a propósito y lo manda a la oficina del director. El niño le dice al director que es aburrido y hasta una estupidez estar sentado en clase.
Lo que en realidad quiere decir es: “No puedo permanecer sentado. Necesito encontrar algo que me interese para poder quedarme quieto y concentrarme”.
La mayoría de los niños pueden permanecer atentos hasta que la clase termina o hasta que el maestro pasa a otro tema. Los niños con TDAH no suelen ser capaces. Cuando se aburren podrían actuar de manera impulsiva, o llamar la atención de maneras inapropiadas.
Tenga en cuenta que los chicos con TDAH con frecuencia se quejan de estar aburridos, incluso cuando pueden hacer lo que quieran. Usted podría escuchar a su hijo decir “¡estoy aburrido!” durante los fines de semana y las vacaciones escolares.
Eso no significa que su hijo sea perezoso ni intente molestar. Lo que sucede es que los niños con TDAH no saben cómo evitar aburrirse.
El aburrimiento y el cerebro de las personas con TDAH
Los niños con TDAH están listos para la emoción y la novedad, y suelen buscar estimulación continuamente. No se trata de un rasgo de personalidad. Hay estudios que sugieren que puede ser debido a la estructura y composición química de sus cerebros.
Considere una clase típica de inglés en la escuela media acerca de Shakespeare. A muchos niños la lección podría aburrirles, pero saben que necesitan aprenderla y conscientemente deciden poner atención.
Muchos niños con TDAH no poseen ese tipo de control. Esto puede deberse a que las partes del cerebro que los ayudan a concentrarse y a no aburrirse no están lo suficientemente activadas, y no funcionan tan eficientemente como las de sus compañeros.
Puede que el cerebro tampoco active ciertos químicos que hacen que las actividades sean satisfactorias, y en consecuencia no se concentren en ellas. También esto puede interpretarse como “aburrimiento” en los niños con TDAH.
Existe otro factor importante en relación con el aburrimiento y el cerebro de una persona con TDAH. Los niños con TDAH tienen problemas con el funcionamiento ejecutivo, o con el sistema de gestión del cerebro.
Los niños con TDAH suelen tener muchas ideas sobre cosas emocionantes que quieren hacer. No obstante, tienen dificultad para planificar, organizar y resolver los problemas para llevarlas a cabo.
Supongamos que un niño de 12 años está entusiasmado con la idea de construir un cometa el próximo fin de semana. Durante toda la semana piensa en el material que usará para hacer el armazón, los colores que usará y quién lo ayudará.
El sábado se levanta de la cama a las 11:00. No ha llamado a ninguno de sus amigos durante la semana y todos ya tienen planes. También se da cuenta de que no tiene los materiales para construir el cometa. Incapaz de proponer otra estrategia o actividad, se pasa el día “aburrido” y desanimado en la casa.
Maneras de ayudar a su hijo cuando se queja de estar aburrido
El aburrimiento no siempre es algo malo. De hecho, es importante aprender a manejarlo. Los niños con TDAH puede que tarden más en averiguar qué hacer, así que dele tiempo a su hijo antes de hacer sugerencias. Él puede encontrar maneras divertidas de usar su tiempo sin que usted intervenga.
Al mismo tiempo, hay cosas que usted puede hacer para reducir el aburrimiento y ayudar a su hijo a lidiar con él:
Programe actividades después de la escuela y durante el fin de semana.
Fomente que su hijo planee con antelación. Ayúdelo a hacer una lista de las cosas por hacer y a usar un calendario que lo ayude a estructurar el tiempo.
No salga corriendo a rescatarlo de su aburrimiento. Invítelo a participar en lo que usted está haciendo, como limpiar el jardín o preparar la cena.
Establezca reglas estrictas con el tiempo que puede pasar frente a la pantalla, y no caiga en la tentación de romperlas cuando su hijo esté aburrido.
También puede buscar actividades divertidas que pueda realizar dentro de la casa.
El aburrimiento en la escuela y con la tarea escolar
Es poco probable que a la mitad de la lección los maestros cambien lo que están haciendo para recuperar la atención de un estudiante con TDAH. Es muy probable que ese niño busque estimulación a través de conductas típicas del TDAH:
Distrayéndose con algo que sucede en el pasillo, del otro lado de la ventana o en otro lugar.
Haciendo payasadas o interrumpiendo.
Retorciéndose en su asiento o solicitando ir al baño.
Pregunte al maestro sobre adaptaciones que puedan usarse en el aula. Por ejemplo, que su hijo use una banda elástica atada a las patas de su silla o se siente cerca del maestro para facilitar que permanezca interesado y enfocado.
Además, hay mucho que usted puede hacer en la casa. Aprenda cómo ayudarlo a descubrir sus destrezas y intereses. Explore diferentes tipos de objetos manipulables (fidgets), así como juegos que mejoran funciones ejecutivas como la planificación y la organización.
Puntos clave
Los niños con TDAH suelen estar deseosos de estimulación y excitación.
Tener dificultad con la planificación y la organización dificulta que los niños con TDAH ocupen su tiempo libre.
Los niños con TDAH pueden encontrar maneras de estar ocupados y evitar aburrirse si tienen apoyo.