6 actividades de motricidad fina para niños
Los niños desarrollan las habilidades motoras a diferentes ritmos. Sin embargo, cuando los niños pequeños tienen problemas con las habilidades motoras finas se dificulta la ejecución de tareas importantes como agarrar utensilios (lápices, por ejemplo), mover objetos con la punta de los dedos y usar herramientas como las tijeras. También pueden tener dificultad para aprender a atarse los cordones de los zapatos. Si las habilidades motoras finas de su hijo necesitan mejorar, ponga en práctica estas divertidas actividades.
1. Plastilina y arcilla
La plastilina y la arcilla a menudo se emplean como parte del “trabajo pesado” que forma parte de una dieta sensorial. También pueden mejorar las habilidades motoras finas de los niños. Motive a su hijo a que apriete, estire, pellizque y forme “serpientes” o “gusanos” con esos materiales. Incluso puede hacer que su hijo intente cortar la plastilina con las tijeras. (Aprenda cómo hacer tres tipos de masas sensoriales, conocidas en inglés como “slime”).
2. Pintar
Diferentes maneras de pintar pueden ayudar a fortalecer la coordinación mano-ojo y la destreza manual de su hijo. Pintar con los dedos permite que su hijo use sus manos y se ensucie. Pintar con un pincel ayuda a que su hijo aprenda a sostener un pincel y a adquirir más control al usarlo como herramienta (los kits para reproducir pinturas por números son excelentes para pintar con pincel). Para agregar un poco de diversión sensorial, puede probar la pintura rasca y huele.
3. Jugar con esponjas
Una esponja nueva y limpia, un poco de agua y dos recipientes es todo lo que necesita para esta actividad. Llene con agua uno de los recipientes y deje el otro recipiente vacío. Su hijo puede humedecer la esponja en agua y después exprimirla en el recipiente vacío. Es un juego sencillo que puede fortalecer sus manos y antebrazos. Si usted corta un pedazo de esponja, y tiene un pizarrón y un trozo de tiza, también puede hacer una actividad multisensorial de escritura a mano del tipo “Humedecer-Secar-Probar”.
4. Competencia de arroz
Divida un puñado de arroz crudo en dos recipientes plásticos y tenga uno vacío a la mano. Entregue a su hijo una pinza de plástico pequeña y tenga otra para usted. Hagan una competencia para ver quién es el primero en pasar todo el arroz de su recipiente al recipiente vacío, usando las pinzas. Si su hijo tiene dificultad porque los granos de arroz son demasiado pequeños, puede hacerlo con cereal en forma de círculos o con cuentas de bisutería.
5. Jugar con agua
Llene un cuarto de taza con agua. Entregue a su hijo una taza vacía y un gotero o una jeringa limpia. Haga que su hijo intente transferir el agua de una taza a otra usando el gotero o la jeringa. También puede dar más tazas a su hijo, añadir colorante de alimentos al agua y hacer un experimento de mezcla de colores.
6. Jardinería y plantar
Las actividades de jardinería pueden parecer actividades más adecuadas para desarrollar las habilidades motoras gruesas, pero algunas también requieren el control de músculos pequeños. Por ejemplo, sembrar una pequeña planta en un agujero en la tierra requiere coordinación mano-ojo. Su hijo también necesitará ser capaz de agarrar una pala para cavar, y usar una pinza para agarrar las semillas que va a plantar.