Dificultades de tener un casillero y cómo resolverlas
De un vistazo
Usar un casillero escolar puede ser complicado para muchos niños.
Algunos tienen dificultad para mantenerlo ordenado y encontrar lo que necesitan para cada clase.
Recordar la combinación y abrir la cerradura son otros problemas comunes.
Usar un casillero en la escuela puede ser complicado para algunos niños. Podrían olvidar la combinación de la cerradura o no conseguir lo que necesitan para la clase. Estos son siete inconvenientes comunes para los niños y recomendaciones para resolverlos.
Dificultad #1: Abrir la cerradura
A veces los niños olvidan la combinación de la cerradura de su casillero. Incluso aunque sepan la combinación, podrían tener dificultad para girar el disco el número de veces necesario o en la dirección correcta. Si la cerradura no abre al primer intento y tienen prisa, puede que se impacienten y se den por vencidos.
Cómo ayudar: Cuando le asignen una cerradura a su hijo en la escuela, asegúrese de que anote la combinación varios lugares. Un buen sitio es anotarla en la parte interior de su agenda. También es buena idea guardarla en su teléfono celular o computadora, si su hijo utiliza estos dispositivos en la escuela.
Muéstrele cómo abrir una cerradura de combinación. Practiquen en la casa para que su hijo pueda hacerlo en el ajetreo del pasillo de la escuela. También puede descargar una hoja de instrucciones para abrir la cerradura a la que su hijo podría recurrir.
Si una cerradura de combinación es demasiado difícil para su hijo, pregunte en la escuela si puede usar una cerradura con llave o un candado de equipaje con letras fáciles de recordar. Piense cuál es el mejor tipo de cerradura para su hijo. Tenga en cuenta que las llaves son fáciles de perder, así que tenga una llave adicional.
Dificultad #2: Encontrar el casillero
Durante los primeros días o semanas del nuevo año escolar, los niños podrían no recordar dónde está su casillero. También podría suceder a lo largo del año, si su hijo se siente estresado o nervioso.
Cómo ayudar: Al igual que con la combinación, haga que su hijo anote el número de casillero y su ubicación. Es útil anotar puntos de referencia cercanos, como la fuente de agua o un salón específico. Guarde esa información junto con la combinación.
Si es posible, hagan un recorrido antes del primer día de clase. Algunas escuelas tienen sesiones de orientación para los estudiantes que requieren más apoyo.
Dificultad #3: Agarrar lo que necesitan en el momento adecuado
Probablemente su hijo no tenga tiempo de ir al casillero antes de cada clase. También habrá ciertos momentos, como antes de la clase de educación física, en que su hijo necesitará ir para sacar cosas específicas.
Cómo ayudar: Ayude a su hijo a determinar cuánto tiempo tarda en ir de una clase a la siguiente. Use un reloj. Luego identifique los recesos en el horario de su hijo para determinar los momentos más apropiados para visitar el casillero. Por ejemplo, si el casillero de su hijo está cerca de la cafetería, la hora del almuerzo podría ser un buen momento.
Usted o su hijo pueden anotar en su agenda o calendario cuándo ir al casillero. Asegúrese de que su hijo coloque una copia de su horario en el interior de la puerta del casillero. Anímelo a seguir estos tres pasos cada vez que vaya al casillero:
Señalar el nombre de la asignatura en el horario.
Pensar en qué necesita llevar para esa clase.
Agarrarlo y llevarlo consigo.
Dificultad #4: Compartir un casillero
Una escuela con muchos estudiantes podría asignar el mismo casillero a dos estudiantes. O un amigo podría pedirle a su hijo que lo deje guardar sus cosas en su casillero, porque está más cerca de un determinado salón. Compartir un casillero puede crear conflictos entre los niños. También podría crear confusión sobre qué pertenece a cada uno.
Cómo ayudar: Si usted sabe de antemano que su hijo tendrá dificultad para compartir su casillero, contacte a la escuela. Tal vez le puedan asignar un casillero más pequeño para que no tenga que compartirlo, o encontrar otra solución.
Si su hijo tiene que compartirlo, practiquen la conversación que tendría con su compañero de casillero. Los niños tendrán que decidir cómo dividir el espacio y si compartirán algunos útiles.
Dificultad #5: Discusiones o demasiada socialización en los casilleros
En el área de los casilleros hay mucha interacción social. Esto puede hacer que los niños lleguen tarde a clase. Además, dado que en los pasillos hay menos supervisión, los casilleros pueden ser un lugar donde los niños discutan o tengan conflictos.
Cómo ayudar: Anime a su hijo a hacer todo lo que necesita hacer en el casillero antes de ponerse a conversar con sus amigos. Si su hijo tiene un teléfono celular, sugiérale programar una alarma para saber cuándo es momento de ir a clase. Practiquen cómo terminar educadamente una conversación.
Practique cómo manejar posibles conflictos que impidan que su hijo vaya a su casillero. Hable sobre qué hacer o decir si los niños lo molestan y cómo pedir ayuda a maestros o consejeros.
Dificultad #6: Tener un casillero desordenado
Uno de los mayores retos para los niños es mantener el casillero ordenado. Si el casillero de su hijo está desorganizado, será difícil encontrar lo que necesita para la siguiente clase.
Cómo ayudar: Recuérdele a su hijo que si su casillero está ordenado tendrá más tiempo para llegar a clase. Lleguen a un acuerdo sobre las soluciones para organizar el casillero. Estas son algunas:
Estantes: Pregunte en la escuela cuáles son las dimensiones de los casilleros. Las tiendas de artículos de oficina tienen estantes y organizadores que se adaptan a la mayoría de los casilleros estándar.
Codificación por color: Asigne un color a cada asignatura y luego haga coincidir este color con la carpeta, cuaderno y cubierta del libro de texto. Por ejemplo, usar azul para matemáticas, verde para ciencias, etc. Organice estos artículos para que sean fáciles de agarrar.
Carpetas y archivadores: En lugar de guardar los papeles sueltos en un casillero donde se perderán, anime a su hijo a usar carpetas o archivadores. Pregúntele qué prefiere. Es más probable que los niños utilicen un sistema cuando participan en la decisión.
Limpieza semanal del casillero: Asegúrese de que su hijo ordene su casillero una vez por semana, siempre el mismo día (por ejemplo, todos los viernes). Su hijo podría sacar ropa o papeles que ya no necesita. Programe también una limpieza más exhaustiva varias veces en el año, como antes de las vacaciones de invierno y primavera.
Busquen ideas divertidas para decorar el casillero. Sugiera una foto de algo positivo, o una frase o cita que le guste. Pero asegúrese de seguir las reglas de la escuela acerca de la decoración de los casilleros. También hable con su hijo sobre por qué algunas imágenes o frases podrían estar prohibidas.
Dificultad #7: Manejar emergencias con los casilleros
Una emergencia puede arruinar hasta los mejores planes. La cerradura de su hijo podría estropearse o se podría presentar una situación de acoso escolar.
Cómo ayudar: Ayude a su hijo a crear un plan de acción si se presenta alguna emergencia relacionada con el casillero. Practiquen cómo pedir ayuda a un maestro u otro miembro del personal.
Algunos niños deciden cargar sus cosas durante todo el día o todo el año, sin decir nad, cuando no pueden abrir una cerradura. Hable con su hijo cada cierto tiempo para saber cómo le está yendo con el casillero.
Dejar que su hijo decida las reglas y la organización del casillero promueve que se haga más independiente. Cuando los niños están a cargo de sus cosas, es más probable que lleguen a clase con los útiles que necesitan.
Puntos clave
Practiquen cómo abrir una cerradura de combinación en la casa para que su hijo pueda hacerlo cuando esté en el ajetreo del pasillo de la escuela.
Tenga un plan de emergencias si una cerradura se rompe o no abre.
Usar un casillero puede ser un gran paso hacia la independencia de los niños.